En el acelerado proceso de descomposición de la situación mundial, descubrimos ahora a los huties.

Autor Pedro Prieto.
Foto : Protesta de los hutíes en 2015 contra los bombardeos de la coalición liderada por Arabia Saudí. Fuente: Henry Ridgwell, VOA (Wikimedia Commons)

En el acelerado proceso de descomposición de la situación mundial, descubrimos ahora a los huties, un movimiento yemení. Mucha gente no sabría colocar al sufrido Yemen en el mapa, país que lleva años sufriendo y aguantando la agresión saudita y que a pesar del inmenso poder económico, financiero y militar no ha conseguido abatir a ese sufrido pueblo.
En el acelerado proceso de descomposición de la situación mundial, descubrimos ahora a los huties, un movimiento yemení. Mucha gente no sabría colocar al sufrido Yemen en el mapa, país que lleva años sufriendo y aguantando la agresión saudita y que a pesar del inmenso poder económico, financiero y militar no ha conseguido abatir a ese sufrido pueblo.

Desde luego, menos se conoce al movimiento hutí, que gobierna en Yemen desde hace unos años para disgusto de Arabia Saudita y EEUU a los que se les cayó su marioneta en la zona.

Desde luego, no cabe duda que Irán ha suministrado armas e inteligencia a Yemen, algo que deja descolocada a la principal potencia, los EE.UU. que han sido incapaces de controlar ese flujo. Todo el mundo sabe que Irán utiliza a Yemen como “proxy” o aliado indirecto para hostigar a los enemigos en la zona y evitar el enfrentamiento directo. Lo mismo, aunque no lo diga nadie que EE.UU. utiliza a Israel como “proxy” en la zona para los mismos fines, ahora en concreto, armando hasta los dientes a Israel para masacrar a Palestina. A veces uno se pregunta si no será más bien que el sionismo utiliza a EE.UU. como proxy para justificar sus propios desmanes y genocidios.

Yemen es un país que hace frontera con Arabia Saudita y Omán y cuya punta suroccidental abarca el estrecho por el que la navegación que va y viene de Asia hacia Europa utiliza para llegar al canal de Suez y al Mediterráneo y ahorrarse los fletes extra que supondría dar la vuelta a toda África por el Cabo de Buena Esperanza. Esa misma vía sirve para que Israel se abastezca por el puerto de Eliat en el Mar Rojo, sin pagar los peajes de atravesar el canal de Suez.

Y de repente, descubrimos una sorprendente capacidad de los yemeníes de atacar barcos de carga con destino a Israel, como respuesta al genocidio israelí sobre Palestina. A muchos países árabes, que lloran lágrimas de cocodrilo por el genocidio palestino a manos de Israel, pero no mueven un dedo, se les habrá caído la cara de vergüenza de ver como el país más humilde, empobrecido y devastado de la zona, por la guerra de agresión saudita, si ha tomado la decisión de atacar todo barco que puedan con destino a Israel.

El número de ataques yemeníes ha sido tal que ya varias navieras importantes como Maersk, han decidido cortar el flujo marítimo por el Mar Rojo y el canal de Suez, al aumentar de forma considerable los seguros. Las implicaciones de este corte, dependiendo del tiempo en que esta decisión de no navegar por allí dure, son al menos del tamaño de lacrisis que provocó el atasco del gigantesco buque portacontenedores en el Canal de Suez. Los grandes buques que alimentan Europa de bienes de consumo y tecnológicos desde China pasan de poder hacer 4-5 rutas anuales a hacer 3-4 rutas anuales. Europa de nuevo y por enésima vez, cae de rodillas de forma considerable. Más aumentos de costes. Parió la abuela para Europa.

No está claro todavía por qué EE.UU. y sus peleles de la OTAN no han reaccionado de forma ostensible durante las semanas en que esto está pasando y han entrado directamente a machacar a Yemen, de forma mucho más contundente que lo que Arabia Saudita ha hecho en los últimos años, seguramente por vivir en un país tan rico que da pereza ponerse a hacer la guerra con tantos lujos al alcance. Ante las dimensiones del escándalo, parece que se está intentando formar una “alianza” (¡otra más!) de países, por supuesto encabezados por los de siempre, los EE.UU. (¿por que lo llamarán DoD o Department of Defense, es decir Ministerio de Defensa, cuando en los últimos 100 años solo han sufrido un ataque en Pearl Harbour, después de haber bloqueado a Japón de combustibles ?. Podrían mejor llamarse DoA o Department of Attack).

Pero los EE.UU., con su inmenso poderío, cuyo presupuesto militar se acerca ya al PIB español, parecen tener dificultades para abordar todos los problemas que han ido creando y ahora les estallan sucesiva y casi simultáneamente en las manos. Mientras tienen dos grupos de combate con portaviones en el Mediterráneo oriental y creo que otro en el interior del Golfo Pérsico, por si hace falta seguir con el genocidio israelí y ampliarlo a Líbano o a Cisjordania, resulta que salta la liebre en el Estrecho de Yemen el de Babel-Mandeb y se ven forzados a enviar urgentemente grupos navales de combate del golfo Pérsico a esa zona.

Tampoco pueden soltar grupos de combate navales de la zona asiática con el conflicto de Taiwán de por medio. Y hete aquí que los que tienen un presupuesto militar del tamaño de un 1% del PIB mundial, ahora empiezan a no dar abasto.

En la “alianza “ para frenar los ataques hutíes a barcos hacia Israel, está también el agresivo Reino Unido, hermano menor del primo de Zumosol y también intentan meter a países (relativamente) controlados de la zona, como Arabia Saudita y algún otro, pero obviamente, deben estar encontrando resistencias internas considerables por vergüenza torera, al ver que los hutíes hacen lo que ellos no se atreven a hacer y es de una mínima solidaridad interárabe.

Por otra parte, Al parecer, hay un cierto temor a los misiles de crucero tierra-mar y algunos tipos de drones (que ya han sido muy probados en Ucrania) que puedan tener los hutíes y que si se les ataca con esa “alianza”, puedan terminar respondiendo y hundiendo algún buque militar occidental. O que si Arabia Saudita se implica, puedan volver a tumbar algunos de sus centros petroleros como hicieron en el pasado.

Es decir, parece que se acerca el momento en que los manejadores de aliados indirectos se van a tener que ver lascaras de forma más directa y sin “proxies”. Y si el Estrecho de Bab el-Mandeb se ha puesto de moda y en titulares como “choke point” o cuello de botellas de la economía mundial (sobre todo europea y china), el segundo y mucho más importante “choke point” del Estrecho de Ormuz está calentando en banda. Y eso es otro nivel, porque por ahí no solo va petróleo y gas licuado a Europa sino a todo el resto del mundo.

Y ya, para recordar, hay un tercer “choke point” que es el Canal de Panamá, que al parecer por falta de agua dulce con que llenar las esclusas para el tráfico, sobre todo de los mercantes más grandes y de mayor calado, algunos de ellos han decidido también darse la vuelta a todo el sur de América por el Cabo de Hornos.

Así que vamos de mal en peor, en todos los sentidos, pero eso si, en España con las tiendas de Navidad llenas y los hoteles al 100%.

Si además, la UE termina pudriendo sus propias normas para satisfacer a su mandatario EE.UU. y rompe el principio de unanimidad para sacudirse a Hungría y poder inyectar 55.000 millones de euros a Ucrania al margen del veto impuesto por Hungría, esto marca el comienzo del fin de una UE idílica. A la mierda el jardín civilizado de Borrell, que se convierte abiertamente en lo que siempre había sido de forma disimulada: un chiringuito donde mandan los de siempre, los del poder financiero y los demás obedecen como borregos.

Por cierto, Egipto debe estar que no le llega la camisa al cuerpo por la falta de ingresos y peajes que suponen estos desvíos que ya no pasan por el canal de Suez y formará parte de la “alianza” contra Yemen, aunque sea una pérdida de dignidad, porque su actitud para con los palestinos está siendo lamentable.

Decíamos ayer que el “choke point” del Estrecho de Bab el-Mandeb, que da paso al Mar Rojo y al canal de Suez, está entrando en ebullición con mas grandes navieras retirándose de circular por allí. En realidad, es una encubierta solicitud al tío Sam para que ponga orden en sus grandes negocios mercantes.

Y decíamos que se le complican las cosas al tío Sam si con todo su poderío no quiere mover los dos portaviones y sus grupos de combate del Mediterraneo oriental al mar Rojo, porque se tene que Hezbolá, que no está dentro de un campo de concentracion sin salida como Hamás, y tiene bastante más poder y espalda, para poder hacer un daño considerable a Israel.

Y en estas veo una notita que parece indicar que el tercer portaviones, el USS Carl Vinson y su grupo de combate está levando anclas del mar de China y poniendo rumbo a la olla hirviendo de Oriente Medio seguramente a encabezar la denominada Fuerza Naval Internacional que se está formando para “normalizar” el paso por el Mar Rojo y el canal de Suez.

Si esto se confirma, creo que se pueden desprender varias cosas:

1. Las leches que se están pensando repartir en la zona, necesitan de tres o cuatro portaviones USA y su grupos asociados mas los mindundis subsidiarios de turno.

2. Parece que los chips y Taiwan son menos importantes o, al menos, menos urgentes que el petróleo y el gas que mana en Oriente Medio. Desde Moisés, algunos ya tenían claro que esa era la tierra de la que manaba leche y miel.

3. Que al final, el destinatario de las hostias, con perdón, que lleva todos los boletos, no son los desarrapados yemeníes, sino posiblemente los astutos persas iraníes.

4. Que ojalá me equivoque y que si no me equivoco, que el Señor nos proteja.

5. Post data. Dije hace unos días que creía que había decenas de miles de millones de papel moneda para Ucrania y para seguir ocupando a Rusia en ese pantano. Aunque los medios occidentales llevan dias diciendo que los republicanos lo han congelado, creo que al final cambiarán el cromo y a cambio de hacer con la inmigración latinoamericana lo que los israelies con los palestinos en materia fronteriza (nazismo puro y duro), aprobarán al final unas decenas de miles de millones para mantener al muerto viviente de Zelenski un poco mas.

Europa ya huele mal, el jardin del patético Borrell está marchito y sus apagados y lastimeros lamentos sobre Israel caen en sacos muy rotos, pero estas Navidades se van a vender mas colonias y perfumes que nunca para disimularlo. Ojalá tambien me equivoque.

El diario El Mundo ha sacado hoy lo de la coalición y lo de las diez Armadas, pero el diario El País ni siquiera lo mencionaba a las 8 de la mañana. Eso si, nos contaban compungidos como han celebrado los funerales con música heavy por el soldado israelí, sin decir en la portada que habia sido asesinado por sus compañeros de armas enarbolando una bandera blanca.

Aquí nos enteramos de dónde, cuándo y con quien va España a la guerra, cuando lo anuncia el Secretario (ministro) de Defensa (y de ataque) de EEUU, Lloyd Austin, un blanco honorario, que decía Chomsky, como lo fue también Colin Powell, y no porque el gobierno mas progresista de la historia de España lo haya conseguido aprobar en el Parlamento español, como debía ser preceptivo.

Ahora saldrá la ministra del lápiz atravesado en la boca a justificar que vamos a machacar a Yemen, por osar atacar a los barcos con destino al genocida Israel, pero lo dirá con palabras bonitas: “para asegurar la sacrosanta libertad de navegación en el Mar Rojo”, por ejemplo.

Y seguramente la viceministra roja y rubia, pondrá durante diez segundos un mohín de disgusto y luego volverá a la cosa de su propia imagen progresista, pero no parece que vaya a romper la coalición porque nuestro amo yanqui haya decidido, con el trágala del Maquiavelo Sánchez, meternos en una guerra de rondón para proteger barcos que llevan suministros al Estado genocida de Israel, porque los hutíes han dejado claro que solo atacan barcos con destino a o procedentes de Israel.

Ver la lista de las diez Armadas es para vomitar: EEUU de líder, un país nazi. Reino Unido, otro que tal. Italia y Países Bajos dos paises nazis y xenófobos. Canadá y Francia, con dos líderes cachorros del world Economic Forum de Schwab, al que se suma el neo-cachorro Sánchez, como Maquiavelin, aspirante a figura del WEF y luego los ridículos rellenos para hacer bulto, de Bahrein y Seychelles, porque ni Arabia Saudita ni Emiratos ni Qatar han querido saber nada de esto al final, después y a pesar de tantas presiones. Deben tener mucho miedo a los misiles hutíes y lo que les pueden hacer en sus infraestructuras petroleras, después de lo que les hayan contado los iraníes, con los que últimamente se llevaban bien.

Pronto veremos si “la libertad de navegación” en el Mar Rojo se extiende también al golfo de Adén, cuando Irán decida enviar barcos a Yemen, lo mismo que todo Occidente los está enviando a Israel, a sabiendas del genocidio que cometen con ellas, sea con la muy necesitada ayuda humanitaria a Yemen y/o con armas, y estos sean interceptados y confiscados por la famosa “Armada invencible de los diez”.

Y seguramente Irán responda haciendo lo mismo en el golfo Pérsico.

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Por Pedro Prieto.

Capturado de una conversación en un grupo de Telegram que a su vez se publicó en canal de Colapso Civilizatorio y que ahora publicamos en colapsistas.com con permiso del autor.